ANTIGUO EGIPTO
El Antiguo Egipto una civilización que se originó a lo largo del rio Nilo, tuvo tres épocas de esplendor faraónico en los periodos denominados: Imperio Antiguo, Imperio Medio, e Imperio Nuevo. Los límites son: Al oeste con Libia, al sur con Sudán, al norte con el Mediterráneo y al este con el mar Rojo e Israel, su idioma oficial es el árabe, en Egipto. El Nilo fue la clave para el éxito de la civilización egipcia ya que favorecía a la agricultura.
Los egipcios erigieron monumentales complejos funerarios para sus faraones y grandes templos, con obeliscos en los cuales grabaron los títulos y alabanzas del faraón, con pinturas representando la vida divina o terrenal. También esculpieron grandes estatuas pétreas representando a dioses y faraones, y pequeñas piezas de orfebrería, con metales y piedras preciosas, y labores de artesanía realizadas en piedra, fayenza o delicadamente talladas en madera. Desarrollaron su propio sistema de escritura, los jeroglíficos, con sus variantes: la escritura hierática y posteriormente la demótica, simplificando su grafía. El egipcio fue de los primeros pueblos en entrar en la Historia, dejando a la posteridad tratados de medicina, matemáticas y relatos mitológicos e históricos, escritos en papiros o grabados en piedra o madera.
LOS INICIOS DE LA CIVILIZACIÓN EGIPCIA
Las evidencias arqueológicas indican que la civilización egipcia comenzó alrededor del sexto milenio a. C., durante el Neolítico, cuando se asentaron los primeros pobladores. El río Nilo, en torno al cual se asienta la población, ha sido la línea de referencia para la cultura egipcia desde que los nómadas cazadores-recolectores comenzaron a vivir en sus riberas durante el pleistoceno. Los rastros de éstos primeros pobladores quedaron en los objetos y signos grabados en las rocas a lo largo del valle del Nilo y en los oasis.
Los estudios también indican asentamientos humanos en el sudoeste de Egipto, cerca de la frontera con Sudán, antes del 8000 a. C. La evidencia geológica y estudios climatológicos sugieren que los cambios del clima, alrededor del 8000 a. C., comenzaron a desecar las tierras de caza y pastoreo de Egipto, conformándose paulatinamente el desierto del Sáhara. Las tribus de la región tendieron a agruparse cerca del río, en donde surgieron pequeños poblados que desarrollaron una economía agrícola. Hay evidencias de pastoreo y del cultivo de cereales en el este del Sáhara en el séptimo milenio a. C.
Alrededor del 6000 a. C., ya había aparecido en el valle del Nilo la agricultura organizada y la construcción de grandes poblados. Al mismo tiempo, en el sudoeste se dedicaban a la ganadería y también construían. La historia de Egipto como estado unificado comienza alrededor del 3050 a. C. Menes, que unificó el Alto y el Bajo Egipto, fue su primer rey. La cultura y costumbres egipcias fueron notablemente estables y apenas variaron en casi 3000 años, incluyendo religión, expresión artística, arquitectura y estructura social.
PERIODOS DE LA HISTORIA DE EGIPTO
• Periodo Predinástico (c. 5500 a. C. - 3200 a. C.)
Entre el 5500 y el 3100 a. C., durante el Predinástico, los asentamientos pequeños prosperaron a lo largo del Nilo. En el 3300 a. C., momentos antes de la primera dinastía, Egipto estaba dividido en dos reinos, conocidos como Alto Egipto Ta Shemau y Bajo Egipto Ta Mehu. La frontera entre ambos se situaba en la actual zona de El Cairo, al sur del delta del Nilo. Se construyeron ya grandes estructuras funerarias, predecesoras de las pirámides.
Los primeros pobladores de Egipto alcanzaron las riberas del río Nilo, traían consigo un conglomerado de marismas y foco de paludismo, en su huida de la creciente desertización del Sáhara. Se sabe, por los restos arqueológicos, que antiguamente el Sáhara tenía un clima mediterráneo, más húmedo que el actual. En los macizos del Ahagar y el Tibesti había abundante vegetación. Para aquellos pobladores, el Sáhara sería una extensa estepa con grandes herbívoros que cazar. Las sucesivas fases del neolítico están representadas por las culturas de El Fayum, hacia el 5000 a. C., la cultura Tasiense, hacia el 4500 a. C. y la cultura de Merimde, hacia el 4000 a. C. Todas ellas conocen la piedra pulimentada, la cerámica, la agricultura y la ganadería. La base de la economía era la agricultura; esta se realizaba aprovechando el limo, fertilizante natural que aportaban las anuales inundaciones del río Nilo. Tras estas culturas aparecieron la cultura baderiense y la cultura amratiense, hacia 3800 a. C.
Hacia el año 3600 a. C. surge la gerzeense, que se difunde por todo Egipto, unificándolo. Esta consonancia cultural llevará a la unidad política, que surgirá tras un periodo de luchas y alianzas entre clanes para imponer su supremacía.
Para lograr mayor eficacia y producción, hacia 3500 a. C., comenzaron a realizarse las primeras obras de canalización y surge la escritura con jeroglíficos en (Abidos).
En esta época inician los proto-estados: Las primeras comunidades hicieron habitable el país y se organizaron en regiones llamadas nomos. Los habitantes del Delta tenían una organización feudal y llegaron a establecer dos reinos con dos jefes o monarcas respectivamente. Un reino estaba asentado en un lugar pantanoso, que se llamaba reino del Junco y tenía como símbolo un tallo de junco. Su capital era Buto; tenían a una cobra como tótem. El otro reino tenía como capital a Busiris y como tótem un buitre pero su símbolo era una abeja y llegó a conocerse como reino de la Abeja. Ambos reinos estaban separados por un brazo del río Nilo. El reino de la Abeja conquistó al reino del Junco de manera que el Delta quedó unificado. Pero algunos de los vencidos huyeron a establecerse en la zona del Alto Egipto donde fundaron ciudades dándoles el mismo nombre que aquellas que habían dejado en el Delta. Por eso muchas ciudades de esta época tienen nombres semejantes en el Alto y Bajo Egipto. Estas gentes fueron prosperando considerablemente hasta llegar a organizarse en un Estado.
A finales de este periodo, Egipto se encontraba dividido en pequeños reinos; los principales eran: el de Hieracómpolis (Nejen) en el Alto Egipto y el de Buto (Pe) en el Bajo Egipto. El proceso de unificación fue llevado a cabo por los reyes de Hieracómpolis.
• Periodo Protodinástico (c. 3200 - 3100 begin_of_the_skype_highlighting 3200 - 3100 end_of_the_skype_highlighting begin_of_the_skype_highlighting 3200 - 3100 end_of_the_skype_highlighting begin_of_the_skype_highlighting 3200 - 3100 end_of_the_skype_highlighting begin_of_the_skype_highlighting 3200 - 3100 end_of_the_skype_highlighting begin_of_the_skype_highlighting 3200 - 3100 end_of_the_skype_highlighting begin_of_the_skype_highlighting 3200 - 3100 end_of_the_skype_highlighting begin_of_the_skype_highlighting 3200 - 3100 end_of_the_skype_highlighting begin_of_the_skype_highlighting 3200 - 3100 end_of_the_skype_highlighting begin_of_the_skype_highlighting 3200 - 3100 end_of_the_skype_highlighting begin_of_the_skype_highlighting 3200 - 3100 end_of_the_skype_highlighting begin_of_the_skype_highlighting 3200 - 3100 end_of_the_skype_highlighting begin_of_the_skype_highlighting 3200 - 3100 end_of_the_skype_highlighting begin_of_the_skype_highlighting 3200 - 3100 end_of_the_skype_highlighting begin_of_the_skype_highlighting 3200 - 3100 end_of_the_skype_highlighting begin_of_the_skype_highlighting 3200 - 3100 end_of_the_skype_highlighting a. C.)
Considerado la fase final del periodo predinástico, también conocido como dinastía 0, predinástico tardío, o periodo Naqada III. Está regido por gobernantes del Alto Egipto que residirán en Tinis, se hacen representar con un serej y adoran a Horus. El nombre de estos reyes figura en la Piedra de Palermo, grabada 700 años después. En este periodo surgen las primeras auténticas ciudades, tales como Tinis, Nubet, Nejeb, Nejen, etc. Son típicos de esta época los magníficos vasos tallados en piedra, cuchillos y paletas ceremoniales, o las cabezas de mazas votivas. Narmer pudo ser el último rey de esta época, y el fundador de la dinastía I.
• Periodo Arcaico (c. 3100 - 2700 a. C.)
La tradición egipcia atribuyó la unificación a Menes, quedando esto reflejado en las Listas Reales. Este personaje es, según Alan Gardiner, el rey Narmer, el primer faraón del cual se tiene constancia que reinó sobre todo Egipto, tras una serie de luchas, tal como quedó atestiguado en la paleta de Narmer. Según Manetón, este periodo lo conforman las dinastías I y II.
• Imperio Antiguo (c. 2700 - 2250 a. C.)
Este se caracterizó por el florecimiento de las artes y la construcción de inmensas pirámides, de esta época las más famosas son: Keops, Kefrén y Mikerinos, en Gizeh. El rey o faraón tenía un poder absoluto, porque era considerado un dios en la Tierra. La capital se estableció definitivamente en Menfis, donde procede la denominación del país. El nombre del principal templo es Hat Ka Ptah "casa del espíritu de Ptah".
Se destaca el ascenso del alto clero y los influyentes gobernadores locales (nomarcas), y durante el largo reinando de Pepy II se acentuará una época de fuerte descentralización, denominada primer periodo intermedio de Egipto. Son las dinastías III a VI.
• Primer Periodo Intermedio (c. 2250 - 2050 a. C.)
Fue un período de descentralización del estado egipcio. Esta época se destaca por un gran florecimiento literario, con textos doctrinales o didácticos, que muestran el gran cambio social. El importante cambio de mentalidad, así como del crecimiento de las clases medias en las ciudades originó una nueva concepción de las creencias, reflejándose en la aparición de los denominados Textos de los Sarcófagos. Osiris se convirtió en la divinidad más popular, con Montu y Amón.
• Imperio Medio (c. 2050 - 1800 a. C.)
Se produjo la reunificación de Egipto bajo Mentuhotep II tras una etapa de descentralización. Tebas se convierte en su nueva capital. Se considera que se inicia con la reunificación. Es un periodo de gran prosperidad económica y expansión exterior, con faraones pragmáticos y emprendedores. Se realizaron ambiciosos proyectos de irrigación en el El Fayum, para regular las grandes inundaciones del Nilo, desviándolo hacia el lago Moeris (El Fayum). También se potenciaron las relaciones comerciales con las regiones circundantes: africanas, asiáticas y mediterráneas. Las representaciones artísticas se humanizaron, y se impuso el culto al dios Amón. A mediados de 1800 a. C., los dirigentes hicsos vencieron a los faraones egipcios; lo que comenzó como una migración paulatina de libios y cananeos hacia el delta del Nilo, se transformó con el tiempo en conquista militar de casi todo el territorio egipcio, originando la caída del Imperio Medio. Los hicsos también vencieron porque poseían mejores armas, y supieron utilizar el factor sorpresa.
Aunque el análisis del cabello de momias del Imperio Medio ha revelado evidencias de una dieta estable, las momias de circa 3200 a. C. muestran señales de anemia y desórdenes hemolíticos, síntomas del envenenamiento por metales pesados. Los compuestos de cobre, plomo, mercurio, y arsénico que fueron utilizados en pigmentos, tintes y maquillaje de la época pudieron haber causado el envenenamiento, especialmente entre la clase acomodada. Este periodo lo conforma el final de la dinastía XI y la XII.
• Segundo Periodo Intermedio (c. 1800 - 1550 a. C.)
Este nuevo periodo de crisis se produjo cuando los hicsos, procedentes de Asia occidental, invadieron Egipto y se instalaron en el norte. Finalmente, los dirigentes egipcios de Tebas declararon la independencia. Proclamaron la "salvación de Egipto" y dirigieron una "guerra de liberación" contra los hicsos. Denominados la dinastía XVII.
• Imperio Nuevo (c. 1550 - 1070 a. C.)
Hace unos 3.500 años, Amenhotep I comenzó a extender los dominios de Egipto hacia Nubia y Palestina. Otro importante faraón de este periodo fue Amenofis IV, que afrontó una profunda reforma religiosa y política. Abandonó Tebas por una nueva capital, Ajtatón (la moderna Tell el-Amarna), que fue construida en honor del dios Atón. Más tarde, Tut Anj Amón volvió a fijar la capital en Tebas. Ramsés II fue el responsable de la mayor parte de las construcciones en Luxor y Karnak, así como de los templos esculpidos en la roca en Abu Simbel. Ramsés III hizo grabar sus numerosas victorias militares en las paredes de su complejo funerario en Madinat Habu, cerca de Tebas. Tras su muerte, el Imperio Nuevo entró en decadencia, por el creciente poder de los militares y de los sacerdotes del dios Amón.
Durante los reinados de Merenptah, sucesor de Ramsés II, y Ramsés III, de la dinastía XX, Egipto tuvo que enfrentarse a las invasiones de los Pueblos del Mar, originarios de diversas áreas del Mediterráneo oriental (Egeo, Anatolia), y de los libios.
• Tercer Periodo Intermedio (c. 1070 - 656 a. C.)
Comienza con la instauración de dos dinastías de origen libio que se repartieron Egipto: una, desde Tanis, la bíblica Zoán, en el (Bajo Egipto), y otra, cuyos reyes tomaron el título de Sumos sacerdotes de Amón, desde Tebas. El periodo termina con la dominación de los reyes kushitas. Son las dinastías, parcialmente coetáneas, XXI a XXV. Durante la XXVII Dinastía de faraones, el país cayó bajo dominio del Imperio persa.
• Periodo Tardío (c. 656 - 332 a. C.)
Comienza con la dinastía Saíta, con dos periodos de dominación persa, así como con varias dinastías coetáneas de gobernantes egipcios independientes. Egipto se convirtió finalmente en una satrapía. Son las dinastías XXVI a XXXI.
• Periodo Helenístico de Egipto (332 - 30 a. C.)
La ocupación de Egipto por las tropas del rey macedonio Alejandro Magno, en el 332 a.C., supuso el fin del dominio persa. Alejandro designó al general macedonio Tolomeo para gobernar el país: nacía así la dinastía de los Tolomeos. Cleopatra VII fue la última gran soberana de la dinastía de los Tolomeos. En un intento por mantener el poder de Egipto, se alió con el general romano Cayo Julio César y, más tarde, con su sucesor Marco Antonio, pero solo consiguió aplazar su final. Después de que sus tropas fueran derrotadas por las legiones romanas de Octavio (posteriormente conocido como el emperador Augusto), Cleopatra se suicidó, en el año 30 a.C. y Egipto se convierte en una provincia del Imperio romano.
• Periodo Romano de Egipto (30 a. C. - 640 d. C.)
Egipto pasó a formar parte del heredero del Imperio romano: el Imperio bizantino. Durante el siglo VII, el poder de los bizantinos fue desafiado por la dinastía de los Sasánidas de Persia, que, en el 616, invadió Egipto. En el 642, el país cayó bajo el dominio de los árabes, que trajeron una nueva religión, el islam, e inauguraron un nuevo capítulo de la historia egipcia.
ECONOMÍA EGIPCIA
La economía de Egipto se basaba en la agricultura. La vida dependía de los cultivos de las tierras inundadas por el río Nilo. Tenían un sistema de diques, estanques y canales de riego que se extendían por todas las tierras de cultivo. En las riberas del Nilo los campesinos egipcios cultivaban muchas clases de cereales. El grano cosechado se guardaba en graneros y luego se usaba para elaborar pan y cerveza. Las cosechas principales eran de trigo, cebada y lino. La agricultura estaba centrada en el ciclo del Nilo. Había tres estaciones: Akhet, Peret, y Shemu. Akhet, la estación de la inundación, duraba de junio a septiembre. Después de la inundación quedaba una capa de légamo en los bancos, enriqueciendo la tierra para la cosecha siguiente. En Peret, la estación de la siembra entre octubre y febrero, los granjeros esperaban hasta que se drenaba el agua, y araban y sembraban el rico suelo. Acabada la labor, irrigaban usando diques y canales. Seguía Shemu, la estación de la cosecha de marzo a mayo, cuando se recolectaba con hoces de madera.
En los huertos se cultivaban guisantes (arveja), lentejas, cebolla, puerros, pepinos y lechugas, además de uvas, dátiles, higos y granadas. Entre los animales que criaban por su carne, se encuentran los cerdos, ovejas, cabras, gansos y patos. Los egipcios cultivaban más alimentos de los que necesitaban, y hacían intercambio de sus productos. Algunas de las materias que ellos importaban de territorios extranjeros eran el incienso, la plata, y madera fina de cedro. Gran parte del los productos del comercio egipcio se transportaba en barcos, por el Nilo y el Mediterráneo.
Durante la mayor parte de su existencia, unos tres milenios, el Antiguo Egipto fue el país más rico del mundo.
VIDA DESPUÉS DE LA MUERTE
El más famoso documento literario legado por los antiguos egipcios es el llamado “Libro de los muertos”. Es una colección de textos funerarios escritos en épocas distintas. Está compuesto por fórmulas mágicas, himnos y oraciones que guiaban y protegían el alma durante su viaje a la región de los muertos.
Se creó la costumbre de enterrar al muerto con sus mejores pertenencias para asegurar su viaje hacia la vida eterna, antiguamente solo los faraones tenían derecho a participar en la vida futura, pero al llegar el nuevo imperio todos los egipcios esperaban vivir en el más allá, y se preparaban, de acuerdo a sus posibilidades económicas, su tumba y su cuerpo; a los cadáveres se le extraían los órganos, que eran depositados en los Vasos canopos, y después cubrían el cuerpo con resinas para preservarlo, envolviéndolo con lino. En la cámara funeraria se depositaban alimentos y pertenencias del fallecido, para su uso en la otra vida.